Claro que ha sido duro ... cuando te llueven tortazos de todos los bandos es lógico que sea duro ... a solo dos días de dejar de pisar ese lugar durante dos meses llego a la conclusión de que no quiero pararme a hacer balance de todas las críticas y malos gestos recibidos ... aun hoy camino por los pasillos y me huele a ambiente podrido de gente que pretende educar pero no para de criticar por la espalda a las personas, de gente que dice algo sobre "machacar" a algunos compañeros , de gente que tiene un cero por ciento de empatía en sus venas y que adora los peloteos de despacho. Soy educadora, y muy orgullosa de ello ... pero no aguando estar en un ambiente lleno de víboras ... necesito descansar la mente ... necesito dejar de estar a la defensiva de forma continua y a la vez dejar de autocontrolarme tanto y mandar a paseo a unos cuantos ...
-2 días para el fin :-)
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